Con un récord invicto de 29 victorias y ninguna derrota, Khabib Nurmagomedov puso fin a su carrera en las MMA. Además, empató el récord de defensa del título de todos los tiempos de la división de peso ligero de UFC, frustrando los intentos de cuatro excepcionales retadores que buscaban destronarlo como campeón.
Tres de esos hombres son, el ex campeón indiscutible de peso ligero, Conor McGregor y los ex campeones interinos, Dustin Poirier y Justin Gaethje. Las victorias sobre ellos fueron impresionantes, con cada victoria más dominante que la anterior, ya que remató a los tres hombres con diferentes estrangulamientos.
Y eso es lo que distingue a ‘El Águila’ de los demás, el dominio. Si bien personas como Jon Jones y Georges St-Pierre tienen más derecho al estatus de GOAT que él, nunca ha habido un peleador tan dominante como Nurmagomedov, y puede pasar algún tiempo antes de que los fanáticos vuelvan a ver a alguien como él.
3. Khabib Nurmagomedov se retiró invicto
Las derrotas son experiencias profundamente negativas que los peleadores deben convertir en positivas, como lecciones, para compensar la amarga verdad de que simplemente no fueron lo suficientemente buenos para ganar una pelea en particular. Eso, sin embargo, nunca ha sido una preocupación para Nurmagomedov.
End of an era for Khabib
UFC debut 29-0 pic.twitter.com/328GviOHTa
— Spinnin Backfist (@SpinninBackfist) March 19, 2021
Ronda Rousey y Joanna Jędrzejczyk tenían la intención de retirarse como campeonas invictas, pero finalmente sufrieron derrotas aplastantes. Mientras que el caso de ‘El Águila’ es diferente. 29 peleadores diferentes intentaron derrotarlo, pero todos fracasaron estrepitosamente, especialmente hacia el final de su carrera.
Es el Floyd Mayweather Jr. de las MMA. No hay ninguna mancha en su historial. Incluso Jon Jones, que nunca ha sido realmente derrotado, tiene una derrota por descalificación que mancha su récord.
2. Jamás sufrió cortes ni hematomas
Es extraño pensar que un peleador pueda participar 29 combates y no sufrir ni una sola lesión facial visible. Pero ninguno es como Nurmagomedov. ‘El Águila’ jamás ha sangrado en ninguna pelea, ni ha salido de un combate con algún hematoma o marca en el rostro.
Si bien Anderson Silva evitó ser marcado durante gran parte de su carrera, ya lo han cortado y abierto antes. Pero el peleador ruso, nunca ha tenido un ojo hinchado ni ha derramado su propia sangre. Que un peleador pueda ser tan dominante que ninguno de sus oponentes pueda siquiera arañarlo en 29 peleas es inimitable.
Never been dropped.
Never been cut.
Never been bruised.
Never lost.
Khabib Nurmagomedov had an incredible career. pic.twitter.com/MSIjC9Wfxk
— MMA History Today (@MMAHistoryToday) February 2, 2022
1. Nunca defendió su título con miedo a perder
Una crítica muy común que enfrentan la mayoría de los peleadores al conseguir un título indiscutible es cuán seguros se vuelven. De repente, los peleadores que alguna vez fueron conocidos por perseguir el final, adoptan un enfoque cauteloso en sus luchas, contentos con tomar decisiones sin tomar riesgos porque temen perder.
Two years ago today, UFC 254
Khabib Nurmagomedov retires undefeated.
Submits Justin Gaethje in Round 2
via triangle choke pic.twitter.com/QIoy6rR9dr— Ocelot MMA (@Ocelot_MMA) October 24, 2022
Pero Khabib era un campeón completamente diferente. Al obtener el título, no peleó con miedo a perder, peleó como si supiera que nunca perdería y se convirtió en un finalizador más efectivo cuanto más avanzaba en su reinado del título, lo que no se puede decir de la mayoría de los campeones de UFC.
No temía correr riesgos porque era tan dominante que la idea de perder nunca se le pasó por la cabeza. Nurmagomedov se afirmó como campeón, acabando con todos los aspirantes al título, mientras que otros lucharon en nombre de seguir siendo campeón.
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