Ni la estabilidad que ha encontrado en BKFC ha podido mantener a Mike Perry alejado de los problemas.
El conflictivo boxeador a nudillo limpio fue arrestado la madrugada del pasado 12 de octubre por conducir ebrio en Lake County, Florida. Según el reporte de MMA Fighting, el Departamento de Policía de Clermont también lo arrestó por negarse a firmar una citación para una aparición en la corte. El peleador de 33 años salió libre esa misma madrugada tras pagar una fianza de $1,500 dólares.
De llegar a ser encontrado culpable cuando comparezca ante la corte este 30 de octubre, Perry podría afrontar una sentencia de hasta 60 días en prisión y una multa de $500 dólares.
El ex Peso Welter de UFC viene de ser finalizado vía nocaut técnico en el sexto asalto ante Jake Paul el 20 de julio. Se encuentra invicto en el bare knuckle con un récord de 5 – 0.