Cuando Kayla Harrison firmó con UFC era difícil imaginarla compitiendo en la división de Peso Gallo considerando que hizo toda su carrera en las 155 libras de PFL.
Año y medio después, la judoca de American Top Team disputará el cinturón de 135 libras frente a Julianna Peña en la coestelar del UFC 316, y el proceso no ha sido nada fácil.
“Es una tortura“, confesó Harrison a Ariel Helwani (vía MMA Mania). “Pero todo lo que siempre he querido está al otro lado de esa tortura. Es un proceso muy solitario. Es mucho más duro de lo que esperaba. Primero estaba el miedo de, ‘Oh, Dios. ¿Podré hacer eso?’ Y ahora es el temor de, ‘Oh, Dios. Tendré que hacer esto’. Definitivamente no es saludable. Niños, no lo hagan. No lo recomiendo. Mi equipo está enfocado. No es fácil pero estoy segura que al final habrá valido la pena“.
Hasta ahora, Harrison ha superado dos veces las básculas de UFC, resultando en dominantes victorias ante Ketlen Vieira y la excampeona Holly Holm.
Lo cierto es que a los 34 años el corte le será a Harrison aún más difícil, por lo que es ahora o nunca.
El UFC 316 se celebra el 7 de junio en Newark, Nueva Jersey.
