Hace unos días, Sean Strickland acusaba a las promociones de boxeo a nudillo limpio de no remunerar bien a sus peleadores. De hecho, el excampeón de Peso Mediano de UFC llegó a denominar como «basura» a esta modalidad de pugilismo que continúa sumando adeptos en Estados Unidos.
Ante estos comentarios, Mike Perry, la cara de BKFC, puso una elevada apuesta de $50,000 dólares a una victoria de Paulo Costa, quien enfrenta a Strickland en una pelea a cinco asaltos programada para la coestelar del UFC 302 de este sábado. De ganar, ‘Platinum’ se embolsaría casi el triple.
Desde su desvinculación de UFC en 2020, Perry se ha consolidado en el bare knuckle, donde, gracias a victorias sobre peleadores como Luke Rockhold, Eddie Alvarez y Michael Page, ha apilado un récord invicto de 4 – 0.
Recientemente firmó una lucrativa extensión con la compañía.