Robert Whittaker es uno de los nombres más importantes dentro de la división de 185 libras de UFC, y es por eso que la organización ha intentado valerse de su estatus para elevar a nuevos prospectos.
Aunque es considerado uno de los mejores Pesos Medianos de la historia, Whittaker ha interpretado el rol de gatekeeper de la división en los últimos años frenando el ascenso de peleadores como Darren Till, Kelvin Gastelum, Marvin Vettori y, recientemente, Ikram Aliskerov.
Consiente de su rol secundario, el australiano explicó porqué se ofreció para pelear con Khamzat Chimaev en la contienda coestelar del UFC 308.
«Desafortunadamente, el deporte no se basa completamente en el mérito«, lamentó ‘The Reaper’ en su podcast, MMArcade (vía MMA Mania). «Chimaev es una pelea dura. Obviamente tiene mucho seguimiento allá en Abu Dhabi. Creo que UFC quiere que Chimaev reciba una oportunidad por el título. Quieren verlo en la cima de la escalera, pero me encanta arruinar sus planes. Me encanta descarrillar sus planes y por eso acepté la pelea. ¿Sabes que fui yo quien pidió la pelea? Justo después después de mi última pelea me percaté que había una cartelera en Abu Dhabi en octubre, así que la agenda encaja perfecto. Les dije que pelearía con Chimaev otra vez, pero que se aseguren que llegue a la pelea. Sé que si le gano no habrá nada en mi camino que me impedirá recuperar mi cinturón«.
Whittaker iba a pelear con Chimaev en el UFC on ABC 6 de pasado 22 de junio, pero el checheno cayó enfermo y tuvo que darse de baja. Terminó siendo reemplazado por Aliskerov, quien sufrió una rápida derrota por KO en el primer asalto.
El UFC 308 está programado para el 26 de octubre.